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¡CRISTO HA RESUCITADO, VERDADERAMENTE HA RESUCITADO!

Estimados hermanos y hermanas,

Muy Feliz Pascua de Resurrección para cada uno de ustedes.

Que el anuncio de Pascua, “Cristo ha Resucitado”, llegue a todos los fieles de nuestra comunidad y que todos nosotros seamos protagonistas en este día en que actuó el Señor, día de gracia, día de gozo, el día de su Pascua, en el que la Iglesia, proclama que el Señor ha resucitado realmente.

Este anuncio que sale del corazón de los discípulos en el primer día después del sábado, ha recorrido los siglos, y ahora, en este preciso momento de la historia, es nuestro grito de gozo, en que hemos vivido tiempos difíciles, grito que cobra más fuerza, porque hemos vivido la alegría de celebrar como comunidad y esto nos vuelve a animar en la esperanza con la certeza de la resurrección de Cristo, Redentor del hombre.

En Cristo Resucitado, hemos resucitado todos, hemos salido de la oscuridad del sepulcro, del dominio de la tiniebla y de la muerte para vivir en la libertad de los hijos de Dios y ser testigos de la luz.

Este anuncio Pascual es el fundamento de nuestra esperanza, si Cristo no hubiera resucitado, vana sería nuestra fe (cf. 1 Co 15,14) y también nuestra esperanza, porque el mal y la muerte nos tendrían a todos como rehenes. Ahora, en cambio, proclamamos Cristo ha resucitado, causa de nuestra alegría.

Este es un tiempo de renovada esperanza en que se nos invita a acercarnos a vivir y celebrar nuestra fe.

El primer saludo del Resucitado a sus discípulos es; ¡Paz a Ustedes! (Jn 20,19.20). Este es el saludo que resuena en el corazón de todos los hombres, que se repite en la liturgia de todo el mundo, especialmente para el conflicto entre Ucrania y Rusia, para la paz en nuestro País, proclamamos la esperanza de la paz, que nos permite construir puentes de comunión, de esa paz verdadera, basada en el amor, la justicia, la verdad.

Quiero reiterar mi saludo ¡Feliz Pascua de Resurrección! Y que la alegría de habernos reunido nuevamente en la celebración de nuestra fe aumente y se acreciente.

Unidos en Cristo Resucitado
Padre Iván Paz